Ser amables, sutiles y cariñosos trae mejores recompensa, que lo contrario, solo pongamos a prueba, seamos consciente de los pensamientos que solemos tener sobre otras personas y veremos grandes resultados. Después de todo, cada cual es nuestro propio espejo.
La pregunta es ¿Qué quiero ver reflejado en mis espejos con pies que la vida me presenta? ¡Buena pregunta!
Podemos tener un ambiente laboral más llevadero, si sabemos que las actitudes del jefe tienen que ver más con su situación que con nosotros, al mismo tiempo que empezamos a evaluar internamente que tanto de su actitud me hace ruido dentro de mí y si quizás me estoy comportando como él con otras personas, en otros lugares. Este práctico ejercicio lo podemos llevar a cualquier área de nuestras vidas, donde creemos que tenemos una piedra en el zapato.
Una buena intención, es hacer una pequeña oración y enviarle Luz y Amor, para cualquiera que sea su equipaje, sepa por si misma cómo hacer la carga más liviana.