Perdón, ha sido una palabra muy usada a través de los tiempos. Solemos pedir perdón por todos los errores que creemos cometer y que han afectado o impactado a otros.
Sin embargo, la connotación de esta palabra desde un sentimiento profundo tiene el poder de sanar-me (sanar-me= sanarme: a mi/ sanar: a otros). Pronunciar la palabra perdón desde una emoción de verdadero arrepentimiento, desde un lugar puro de querer enmendar una situación y desde una un deseo genuino de crear un lazo de unión, rompe las barreras físicas que me he construido, aún cimentado con lo que para mí significa el material más potente que existe.
-. Si perdonar alivia el dolor que causo, entonces sería la transacción más exitosa cotizada en Wall Street.
-. Si perdonar alivia el dolor que ME causo, entonces…
Cuando escribí sobre que El Perdón Empieza por la Aceptación, me permití comprender de una manera más sublime ¿Quién soy? Ya que escribirlo y leerlo, me dio una apertura de consciencia hacia lo que considero que soy como humano.
En el mundo físico donde vivimos, el tiempo es un excelente recurso que me permite estar en sincronía con el resto, como poder coincidir con otros, así como poder evitar colisiones entre las cosas físicas que los humanos hemos creado. Pero en el mundo energético, el tiempo no existe y las emociones habitan en este mundo, que aunque no las veo, las siento; y que por cierto, son las emociones quienes han estado piloteando mi vida sin yo darme cuenta. Solo imaginar todas mis emociones tomando mis decisiones, me llevan a darme cuenta, porque vivo la realidad que vivo.
Así pues, el perdón hace vida en el segundo mundo, el energético. Y a su vez, el perdón llega cuando me doy cuenta de que algo que consideraba mi verdad, no lo es más nunca. De allí parte el dicho: ponerme en los zapatos del otro, me lleva a perdonar. Si aún no termino de convencerme de lo anteriormente dicho, cómo me explico que cuando me acuerdo de una situación desagradable, inmediatamente viene a mi mente el rostro de la persona y mi cuerpo empieza a liberar químicos que me hacen revivir ese momento como si estuviera allá y no aquí. Lo mismo ocurre cuando me encuentro en la etapa de enamoramiento, solo pensar en esa persona, me hace reír, me hace sentir felicidad, llegando al punto de hacerme sentir orgasmos.
¿Por qué ocurre esto?
Porque mi realidad me la he creado YO en base a mi sistema de creencias, pero esto no significa que es la verdad verdadera. Por lo tanto, cuando me pongo en los zapatos del otro, estoy entrando de forma humilde y compasiva, en el sistema de creencias de esa otra persona. Y es así, porque soy capaz de ver lo que ha vivido, soy capaz de ver lo que lo ha llevado a comportarse como se comporta, es decir, ver desde el alma para poder entender su postura, aun cuando vaya en contra de mi propio sistema de creencias.
Consecuentemente esto me da una pista: cuando reprogramo mi sistema de creencias, me libero de un esquema del ¿Cómo deberían suceder-me las cosas? Y puedo cambiar mi realidad, para dejar de conformarme con esos pequeños placeres que me vienen cuando estoy intentando controlar una situación, cuando estoy validando o buscando que me validen, cuando sentirme digna proviene de un logro o resultado que estoy esperando que ocurra, cuando estoy esperando que me den eso que tanto quiero para llenar mi carencia emocional, etc. Al final todo eso se traduce en un peso que conlleva a la rabia, a la ira, al dolor, al sufrimiento, a la culpa, a la angustia, etc.
Por lo tanto, primero debo estar consciente de que TODOS estamos interconectados. No existe algo como, mala suerte o malas personas. Todos estamos operando bajo la ley de causa y efecto. Todo lo que he aprendido a lo largo de mi vida, sobre todo al inicio, lo que aprendí de mis seres más amados, es lo que suelo repetir. Si por ejemplo, la forma como yo vi que mi madre se amaba, era sacrificándose a ella misma por el bienestar de sus hijas, era tratando de perfeccionarse constantemente para poder sostener ella sola todas las áreas de su vida, incluyendo sostener la forma como se relacionaba con ella, con la casa, con la familia, con los amigos, con la pareja, con el dinero, con su salud, con el trabajo, con su cuerpo, con las adicciones, etc. Eso es lo que yo desde niña voy a asociar con amor propio, con la forma como debería amar y ser amada. Y por supuesto, como amo tanto a mi madre, por amor a ella, voy a repetir lo que aprendí con su ejemplo.
Así se crean los sistemas de creencias. Pero no tiene que ser una verdad para siempre, si me doy cuenta de que no estoy siendo feliz, es porque hay algo de mi sistema de creencias que debo optimizar, para conseguir mejores resultados.
Entonces, perdonar es viajar alguna parte de mi pasado y optimizar mi sistema de creencias. De allí empezar a crearme otra realidad.
Voy a imaginarme que mi sistema de creencias y mis emociones viven en un lugar llamado nube, como ICloud de Apple y que los siguientes ejercicios, terapias o herramientas, me permiten ir a esa nube y extraer los archivos que ya no me funcionan, que están interfiriendo con mi sistema operativo, mi cuerpo o que simplemente necesitan una actualización.
Existen muchísimas herramientas para perdonar, cambiar sistema de creencias, viajar en el tiempo, yo voy a nombrar solo tres de varias que uso y que considero soy muy poderosas. Pero si quieres saber más presiona AQUÍ ¡Abriéndome a las posibilidades!
Las que debo hacer bajo la ayuda de un experto:
EL Código de la Emoción (Emotion Code); es un sistema avanzado de sanación energética creada por el Dr. Nelson Bradley, que permite viajar al subconsciente de una persona para poder liberar la carga emocional que se ha quedado con el pasar del tiempo a través de las experiencias que vivimos o que heredamos de nuestros ancestros. Dichas emociones generalmente nos mantienen atascados en problemas físicos, emocionales y dificultades en todas las áreas de la vida. Esta revolucionaria forma de sanación me ha permitido liberar el muro de mi corazón, liberarme de emociones que ni siquiera me pertenecían, que pasaban de generación en generación y descubrir la raíz de un equipaje que he venido arrastrando como un grillete en mi pie. Me certifique hace dos años en este tipo de sanación y desde entonces la practico. Nota: se usa para animales, recordando que el reino animal son seres vivos que también tienen un alma.
Regresión; las regresión es una meditación consciente (es decir la persona sabe lo que está pasando), que se hace de forma guiada con la ayuda de un experto y que me permite viajar al momento donde se produjo cierta creencia, para poderla enmendarla. Las regresiones son una de las experiencias más liberadoras y transformadoras que he experimentado en mi vida, no solo porque me ha permitido liberarme de una carga, sino porque me ha permitido reconstruir ese evento desde un lugar de amor para cambiar por completo mi realidad y mi futuro.
La terapia que puedo hacer yo misma:
1. Cartas a nuestro niño interior; esta increíble y poderosa terapia la aprendí de la escritora Belén Aguirre. Se realiza a través de una carta que me escribo a mí misma, pero en diferentes momentos del tiempo, es decir se la escribo a la persona que fui en el pasado, a la persona que creó una creencia a partir de una experiencia que vivió y que hoy sigue repercutiendo en mi vida. Para ello, es sumamente importante identificar en qué línea del tiempo me encontraba, cuando ocurrió el evento que emocionalmente tiene relación en mi presente. Una vez que me doy cuenta, que esto que estoy sintiendo y que no me gusta, me recuerda con una experiencia que viví cuando tenía equis edad y con las personas involucradas, es cuando busco el cuaderno que tengo destinado para esta terapia. Luego busco un lugar cómodo donde tenga privacidad, cierro mis ojos inhalo profundamente dos o tres veces y me imagino acercándome a mí misma en aquel momento (como un ser querido que se acerca a mí para darme consuelo). Avanzo usando mi imaginación y empiezo a hablarle mentalmente con amor y dulzura hasta que logro que levante su rostro, le digo que todo va a estar bien, que ya estamos juntas (usualmente mente este momento es muy íntimo y generalmente lloro mucho). Después de ese contacto abro mis ojos y empiezo a redactar la carta a ella, desde una perspectiva diferente para lograr cambiar a nivel energético, desde la raíz aquella circunstancia. La idea es reconstruir la “escena del crimen” hacia un momento de experiencia positiva, que incluye a todas las personas involucradas. Lloraras a moco suelto.
Cuando empecé a usar estas herramientas, fue cuando pude adentrarme en la relación más importante que existe: la que tengo conmigo. Y desde allí empecé a cambiar mi realidad en lo que es ahora para mi significa amarme, dar amor y recibir amor. TODO lo demás, TODA la realidad que me había construido, absolutamente TODO comienza a optimizarse hacia los mejores resultados posible, desde el bienestar y la coherencia que existe dentro de mí.
Es importante comprender que mientras esté viva, voy a ir avanzando en un despertar espiritual que me llevará tantas veces como sea posible a sanarme. Debo tener paciencia y abrazarme a lo largo de mi vida, porque ver las cosas desde otra perspectiva muchas veces me lleva a cuestionarme desde la culpabilidad. Da mucho miedo ver nuestra propia oscuridad, pero es importante para poder iluminar esas partes de mí misma. Debo ser amable para saber que no hay nada malo en mi proceso de vida y que todo está pasando de forma perfecta para ir creciendo internamente. !No estamos solos en este proceso!
Me perdono, me libero. Sólo veo aquello que soy, solo puedo dar aquello que tengo.
Por una vida con más liberaciones, Sarah.
