La manifestación de los milagros se encuentra detrás de lo conocido; es decir, para poder ver la manifestación de un milagro debemos adentrarnos en lo desconocido.
Pero qué es lo desconocido.
Lo desconocido, es para cada persona algo completamente diferente. Sencillamente, es aquello que aún no sabemos que existe. Sin embargo, nuestra ignorancia no necesariamente implica que no exista, al menos no para el resto de las personas.
Esto quiere decir, que mientras estamos viviendo acontecen infinitas manifestaciones, tanto dentro, como fuera de nuestro organismo; y nosotros formamos parte de esos milagros, inclusive los que están ocurriendo dentro de nosotros mismos a espaldas de nuestra visión física o nuestras creencias.
Todos podemos crear milagros, todos tenemos ese poder. Pero en términos de “deseos” o “necesidades” lo que para una persona es un milagro, para otra es solo algo común y viceversa.
El truco se encuentra en que cada persona posee sistema de creencias diferentes que los hace reaccionar de maneras diferentes, unos de otros -aunque existen otras personas que coinciden reaccionar de manera similar ante las mismas experiencias y suelen llamarlo coincidencia; por lo tanto, lo que para una persona es un milagro, algo que se encuentra más allá de la lógica racional y de sus creencias, para otras personas es simplemente el día a día.
Algunos ejemplos los encontramos en la salud (recuperarse de una enfermedad aparentemente letal), en el dinero (tener un golpe de suerte), vivir en armonía y sin problemas, casarse con una persona que sea su complemento de vida y tener una familia, vivir en abundancia, etc.
Los milagros se encuentran más allá de nuestro sistema de creencias. Sarah Rojas
Lo que quiero decir, es que de acuerdo con el sistema de creencias de cada persona se considerará un milagro a aquello que rompe las leyes físicas, al menos para la lógica racional de esa persona. Si alguien ha disfrutado siempre de excelente salud, pero no ha tenido éxito con las relaciones de pareja o en los negocios, esperara un golpe de suerte o un milagro en las áreas donde siempre ha existido la carencia y no en áreas en dónde ha existido la abundancia.
Pero ambas, tanto la percepción de abundancia, como la percepción de carencia la manifestamos desde sistema de creencias diferentes y de hecho ambas gatillan dentro de nosotros diferentes sensaciones de reacción. De allí nace la interpretación que le damos a cada experiencia.
No obstante, somos abundancia, estamos hechos de abundancia. La abundancia es la ley en todo el vasto e infinito mundo, universo, galaxia; y siempre que estemos evolucionando nuestra consciencia estaremos más conectados con esa abundancia.
Por esta razón, estos son algunos pasos para construir el mejor modelo para manifestar tus propios milagros.
1. Ten muy claro el deseo, la intención -aquello que quieres manifestar en tu vida- el milagro.
2. Usa tu poder innato, usa tu imaginación y recrea ese milagro que deseas, cómo se ve, cómo se siente, quiénes forman parte de ese milagro. ¡Siéntelo! ¡Repítelo!
3. La próxima vez que ocurra algo que te haga sentir fuera de la ruta de tu milagro y que te lleve a reaccionar desde la misma carencia, cierra tus ojos y ensaya con tu imaginación cómo reaccionarías la próxima vez.
Con tan solo estos tres pasos, empezarás a instalar el software neurológico en tu cerebro. Porque la carencia de los milagros, te está mostrando que existe carencia en tus creencias y qué debes mejorar esas ideas que tienes sobre ello. Es decir, reprogramar tu sistema de creencias, ya que es lo único que te está limitando.
Recuerda que el miedo, la angustia, la añoranza, la frustración, la ansiedad, la rabia, los celos, la desesperanza, etc., que sientes cuando no ves los milagros en tu vida, son de tu sistema de creencias, no son tuyos -aunque paradójicamente hagan vida en el mismo cuerpo- pero lo que tu realmente eres es abundancia, seguridad, creatividad, pasión, energía, amor, valía, confianza.
¿Vez por qué hago tanto hincapié en observar para reprogramar nuestro sistema de creencias?
Por otra parte, se van a presentar oportunidades y tienes que aprovecharlas, aún cuando no luzcan como tu milagro. Porque esas oportunidades te abrirán más puertas y esas puertas son simplemente una muestra de que la llave para abrirlas siempre las tienes tú, eres tú.
Para mí ha sido un año lleno de muchos retos, comienzos, finales, aprendizajes y evolución interna.
Y en estas fiestas, mi más puros y sublimes deseos para ti, es que desde ahora tu viaje -sobre todo el de tu consciencia- te esté conduciendo hacías tus milagros, uno tras otro y que en el camino creas en la Luz, la abundancia y el infinito amor que reside dentro de ti.
Porque la manifestación de tus milagros está esperando a que tú tomes acción después que tengas el deseo o la intención bien clara. ¡Y ve por ello mi creador!
Con la magia de los milagros, Sarah.
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