El privilegio de escuchar la inteligencia de nuestro cuerpo, nos dirige con exactitud hacía el camino correcto.
La inteligencia de nuestro cuerpo posee información que no podríamos conciliar en esta vida por completo, incluso si viviéramos más de trescientos años. Esto se debe porque nuestro cuerpo se encuentra conectado con una antigua sabiduría que aún sigue siendo un completo misterio para todos.
Si bien la inteligencia de nuestro cuerpo resulta misteriosa, también lo es, que existen muchas técnicas o herramientas que permiten acercarnos cada vez más desde el cuerpo físico, hasta esa parte de nosotros mística o energética que es la fuente que nos guía hacía el cómo, el dónde o el qué.
Para ilustrar esa maravillosa fuente de poder, imagina que tu cuerpo es la lámpara mágica y que dentro de ella vive el más antiguo, sabio e inimaginable mago que hace realidad todo lo que deseas, aun cuando no sepas cómo desear, porque esté mago responde de acuerdo con la vibración de nuestro deseo, no desde el deseo en sí.
La vida me ha enseñado que es imposible obtener toda la información o la totalidad de nuestra vida de una sola vez. No porque no nos la merezcamos o porque nuestra inteligencia no nos la quiera entregar; más bien porque nuestra físicalidad no podría contenerla. Recordemos que estamos extremadamente limitados por nuestros cinco sentidos, por nuestro sistema de creencias y por todo lo que implica este mundo 3D.
Por consiguiente, querer contener todo de una sola vez, es como querer comernos en el desayuno toda la comida que nos comeremos por el resto de nuestra vida. Y sé perfectamente de lo que hablo, porque por muchos años me he mantenido queriendo que las cosas se desarrollen antes de que cada etapa madure a su tiempo perfecto.
Entonces, cuando somos capaces de escuchar la inteligencia de nuestro cuerpo podemos elevarnos por encima de todas las cosas que físicamente consideramos importantes, para poder ir más allá de estas cosas y construir un genuino balance entre la parte física de quien somos y la parte energética de quien somos.
No obstante, es muy importante que avancemos a nuestro propio ritmo, que seamos conscientes de que si estamos en esta tierra, viviendo experiencias humanas, experimentando los contrastes, es porque forma parte de nuestro camino. Por lo tanto, la oscuridad, la enfermedad, el caos, los desastres, el desorden, el desbalance, el desequilibrio, son parte de este todo.
Lo que nos permitimos al escuchar la poderosa inteligencia de nuestro cuerpo, es atravesar estos contrastes estando seguros y confiados de que el opuesto a todo eso también se encuentra disponible para nosotros, siempre, siempre, siempre dentro de nosotros mismos; inclusive cada situación que consideramos negativa, que se siente negativa, que se vive negativa… ahí también se encuentra nuestra inteligencia tratando de decirnos algo.
Así pues, las emociones, mis emociones, tus emociones, son un acertijo que nos están empujando para que nos movamos desde un patrón de sistema de creencias al otro. Por ende, si bien todas las emociones son las mismas para todas las personas, cada uno le da el significado y el poder enmarcado desde nuestra única e individual perspectiva que fue originada por nuestras tempranas experiencias de vida.
De esta manera, cuando empezamos a escuchar la inteligencia de nuestro cuerpo, es como frotar la lámpara que desata el poderoso mago que todos llevamos dentro.
Deseo que todos seamos capaces de escucharnos desde la calma, desde las lágrimas, desde quien somos hoy.
Con Amor Sarah.
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